Organizado
por la Dirección General de Empleo y Juventud de la Junta de Comunidades de
Castilla La Mancha, en colaboración con la Red Española de Albergues Juveniles
y la Biblioteca de Castilla La Mancha, se acaba de celebrar el II Encuentro de
Jóvenes Creadores en el castillo de San Servando de Toledo.
Empezar citando la organización de
estas tres instituciones no es baladí; estamos hablando de una experiencia
única en el terreno de la enseñanza, o impulso, de las capacidades creativas,
más sobresaliente en el caso de la escritura creativa por su total ausencia de
práctica reglada en el mundo, pero igualmente gratificante en el terreno de la
enseñanza del guion de cine y de la dramaturgia, que tan necesitada está de
desarrollos similares.
Durante una semana, un grupo de
jóvenes han vivido inmersos en un ambiente favorable a la creación, aprendiendo
las respectivas técnicas y caminos que conducen a ser un profesional o,
simplemente, a acercarse a ese mundo mágico que te puede ayudar igualmente en
el mundo cotidiano, colaborando en mejorar tus capacidades en otros territorios
de la vida laboral y social. Compartir las intensas sesiones de trabajo, y
también convivir el resto del tiempo, permiten a los participantes entregarse
sin resquicios al hecho creativo, a entender qué significa narrar en sus
diferentes formas expresivas, porque su misterio está permanentemente presente
en sus vidas a lo largo de esos días emocionantes.
Chema Rodríguez-Calderón en el
apartado de dramaturgia, Sergio Martínez al frente del taller de guión de cine,
y Víctor Claudín dirigiendo el taller de creación literaria, en el que también
han colaborado Alfons Cervera, Carmen Peire y Javier Baonza, todos con
experiencia profesional demostrada, así como con práctica en talleres y
enseñanza en los ámbitos correspondientes, ha sido el equipo que ha acompañado
en sus ilusiones y su entrega a la veintena de jóvenes que este año han tenido
el lujo, como ellos mismos han reconocido, de participar en este magnífico
proyecto, cuya única duda es la de saber si va a seguir existiendo,
reforzándose en sus necesidades y posibilidades.