6.11.18

"Flotar sin máscara". Cinco obras de teatro de mujeres, de Marías Guerreras en Ediciones Irreverentes


Flotar sin máscara - Cinco obras de teatro de mujeres
Marías Guerreras (Alicia Casado, Marina Castineira, Carmen G. de la Bandera, Blanca Ortiga y Margarita Reiz).
Edición bilingüe español-inglés.
Traductores/as: Andrew G. Hargreaves, Marina Castiñeira, Amaya Cuevas, Blanca Pascual y Laurie L. Urraro.

Colección de Teatro, nº 90
ISBN: 978-84-17481-04-9 
PVP: 24€ • 414 páginas


Habitar en un mundo líquido significa aceptar que lo permanente ha desaparecido, que la realidad es como una pintura impresionista donde todo fluye inasible, informe e imprevisible, y esto es causa de ansiedad. La diferencia es que Monet sí estaba convencido de que la auténtica Catedral de Rouen existía, si se sumaran todas sus manifestaciones posibles, pero el hombre actual camina sobre arenas movedizas en un incesante movimiento a ninguna parte.
            El libro que presentamos contiene teatro. La palabra teatral es una palabra creada, paradójicamente, para ser oralizada, para convertirse en señal evanescente que muere en el propio acto de su enunciación. Porque si hay un género líquido, ese sería el teatro. Entonces, en un mundo en permanente movimiento temeroso del reposo para evitar el vértigo, en el que todo cambia, la palabra escrita es un bello signo de permanencia, para poder desafiar al tiempo y a la muerte, y además reflexionar sobre si en nuestras voces dramáticas hay un asentimiento o una disconformidad con esta nueva cosmovisión líquida.
            Este libro recoge, en apariencia, cinco textos muy diversos: Im-Postura de Blanca Ortiga, una obra sin texto escrito en la que la palabra se transforma en acotación para diseñar una partitura de movimientos; 2015, regreso al pasado, que es una distopía sobre un momento en la historia de un país, no difícil de identificar con el nuestro, en el que una ley anula el matrimonio homosexual obligando a los homosexuales a someterse a un tratamiento. Pinotxa, aprendiendo a vivir. O de cómo encontró a Dogot de Marga Reiz, es una pieza de teatro infantil en la que un sabio loco, mezcla de payaso, doctor Frankenstein y Geppetto, crea una niña Ciborg con la finalidad de que cobre vida y se humanice; De comunión de Carmen Gómez de la Bandera, que sitúa a dos traviesas niñas, Mari Cruz y Mari Fe, repitiendo, una y otra vez, el día —indicado en el título— “más feliz de sus vidas”, y por último, Anónima Empatía de Marina Castiñeira, una tragedia “a la griega” que intenta fusionar dos épocas aparentemente muy distintas como son la Grecia de Pericles y nuestra contemporaneidad.
                                                           (Alicia Casado).
Marías Guerreras

A.M.A.E.M. o la Asociación de Mujeres de las Artes Escénicas de Madrid, o más sencillamente las Marías Guerreras, somos una asociación integrada por una diversidad de directoras, actrices, dramaturgas, investigadoras, escenógrafas, iluminadoras, técnicas de sonido, regidoras, tramoyistas, músicas, bailarinas… en suma almas idealistas que conciben el teatro como texto y espectáculo, y que en esta realidad competitiva, creyentes y practicantes de la sororidad, aúnan sus esfuerzos para visibilizar la labor de la mujer en el ámbito escénico y denunciar la desigualdad y la violencia ejercida sobre las mujeres. Desde 2001, entre sus avatares creativos y didácticos, Marías Guerreras/b> han realizado y producido espectáculos, ciclos de actividades y han publicado libros como I Ciclo de las actividades de las Marías Guerreras en Casa de América (El Astillero, 2004), Mujeres en seis actos (Castalia, 2005), De la vanguardia a la memoria (Castalia, 2006), El teatro de papel (Primer Acto y Ayuntamiento de Madrid, 2008) y el que ahora presentamos. Esta enorme labor ha sido reconocida con varios premios como el Premio XVII Muestra de Teatro, Torreperojil en 2002, el Premio Fundación Carolina Torres Palero en Valencia, en el año 2005, Premio Palma de Alicante en 2014 o el Premio Rosa María García Cano de 2017, de la Feria de Castilla y León en Ciudad Rodrigo.